No existe la meta

La meta en el horizonte

Me presento, soy Jordi Pérez, propietario de La Barberia de Gràcia. Y antes que nada quiero agradecer a Xavi Bustamante la oportunidad que me brinda de poder hacer públicos mis pensamientos y mis reflexiones acerca del mundillo de la barbería.

Yo, por suerte o por desgracia, ya llevo muchos años en este sector. Era un chaval de corta edad, cuando salía del colegio e iba a la barbería mi padre para echar una mano realizando las tareas propias de un aprendiz: enjabonar barbas, lavar cabezas, pasar la escoba, limpiar espejos,… en fin, lo que hacían los aprendices en aquella época.

Me acuerdo también cuando iba a eventos o formaciones. Cuando me tenía que presentar delante del grupo y no me atrevía decir que era barbero. Yo iba por la vida diciendo que era peluquero de caballeros. Parecía que no sonaba tan mal. Pero el resto de los asistentes me miraban con condescendencia, hasta con un poco de pena como pensando: “pobrecillo, míralo, una especie a punto de desaparecer”. O también cuando iba a una feria profesional en la que no había nada, absolutamente nada, dedicado al sector masculino. Todo eran grandes marcas, productos fantásticos, imágenes estupendas, pero siempre enfocadas hacia un público femenino, a un peluquero de señoras o como mucho un peluquero unisex, pero que trabajaba el caballero casi como de pasada.

Por eso, cuando veo a la situación actual, gente joven que aspira ser barbero, mails que recibo de gente que quiere iniciarse en el mundo de la barbería, aprender el oficio y recibir formación, me maravillo de cómo ha cambiado la situación. Ahora cuando voy a las eventos la gente te reconoce como profesional, valora el trabajo que hacemos, y en las ferias veo una gran zona dedicada en exclusiva a todo el mundo de la barbería !ahora sí que nos tienen en cuenta las marcas de productos¡ Y también, por descontado, hay más formaciones que nunca dedicadas al mundillo de la barbería (quizás hasta demasiadas).

¡Por no hablar de los premios! antes sólo existía el Campeonato de España de Peluquería (todavía sigue existiendo claro), a la que los gremios de las diferentes provincias presentaban sus candidatos. Ahora tenemos desde, el campeonato que presenta una marca como puede ser American Crew, hasta los premios de Barberías Con Encanto, o la parte masculina de los Premios Fígaro, los Premios Tocado o las Battle Barbers que han proliferado muchos estos últimos años. En fin, hay un sinfín de premios centrados en la peluquería masculina o barbería.

Tengo la impresión de que nos hemos ido de un extremo al otro, pero ¿qué es lo que nos deparará el futuro? Yo, sinceramente, pienso que este momento dulce que estamos viviendo ahora es fruto de una moda y de una tendencia que, como todas las modas o las tendencias, será pasajera. Por eso, no desaprovechemos la oportunidad que hemos tenido de llenar nuestros salones de clientes y no nos durmamos en los laureles. Es muy importante continuar recibiendo formación y seguir creciendo profesionalmente.

No estamos en la meta. No existe la meta. La meta es un camino y nunca se llega al final. Siempre hay que estar pedaleando, si no la bicicleta se cae.

Y luchemos entre todos por mantener la ilusión que genera la barbería en las generaciones más jóvenes y no dejemos que nos vuelvan a ver a los barberos como nos veían años atrás.

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