La Profesión más bonita del mundo – Juan Balaguer – “Influencers”
Mi jefe hace años decía: “La publicidad le da vida a la empresa” y cuando lo hacía con poco dinero y algo de ingenio, la verdad es que funcionaba.
Claro está que eran cuatro las peluquerías en aquel momento y cientos de clientas.
¡Qué diferente ahora!
Hay muchas y pocas clientas a la vez.
El problema hoy es que hay cientos de anuncios de todo tipo que nos han hecho perder la curiosidad y que ignoramos.
Los clientes saben que hay buenos profesionales, pero son tantos los mensajes que huelen a estafa, que no se fían de nadie si no les recomiendan.
Y claro, no todos disponemos de influencers que digan lo buenos que somos.
Además, son pocos los fiables y, con todo eso, no garantizan resultados.
¿No sería más creíble (e inspiraría más confianza) que fueran otros los que dijeran lo buenos que somos?
Tenemos un equipo de ventas que no utilizamos y al que no tenemos que pagar.
Son aquellas clientes que nos usan y que se han convertido en fans motivadas las que dirán maravillas de nosotros.
Si conseguimos convencer a nuestros clientes para que nos recomienden, podríamos llegar a tener a muchos vendedores felices vendiendo de forma gratuita nuestro trabajo.
O es que no te acuerdas la última vez que recomendaste: “El Mago Pop te sorprenderá”, “Si quieres la mejor paella no lo dudes, Calle del pez nº5”, “Mi mecánico solo con el ruido sabe que tiene mi coche, Di que vas de mi parte, te solucionará el problema, es rápido, a un buen precio y verás lo agradable que es”.
Este tipo de publicidad es más barata, ya que sólo nos cuesta un detalle a la fan que ya nos conoce y nos usa, que hacer descuentos, porque siempre hay alguien dispuesto a hacerlo más barato que tú.
Si tu sueño es ser referente en tu zona, el boca oreja de siempre se convierte en una estrategia de marketing que todos podemos hacer si logramos que cada clienta feliz se convierta en influencer.
J.B.
Xavier Bustamante – sobre lo escrito por Juan Balaguer
El boca-oreja ha sido y sigue siendo, el medio más eficaz de publicitar, de recomendar.
Alguien que conoces y mirándote a los ojos te cuenta su buena experiencia con algo, te transmite esas ganas de replicar lo que experimentó, necesidad que nace de la confianza que en parte, esta persona deposita en lo recomendado.
En esta era del plástico que se mercadea con cualquier cosa, más con las recomendaciones, una opinión en formato de carne y hueso, nacida de la empatía de haberse encontrado en la misma encrucijada, es lo mas apreciado como consejo, como recomendación.
Para poder ganar este tipo de ‘campañas publicitarias vivientes’, la fórmula es la de siempre, ofrecer CALIDAD y BUEN SERVICIO, la campaña se monta sola…
