¿No pusiste tu empresa para ganar dinero?

La Profesión más bonita del mundo – Juan Balaguer – “¿No pusiste tu empresa para ganar dinero?”

Hay una cosa que tiene que estar clara.

Para funcionar bien, necesitamos clientes.

No te arriesgaste a poner tu empresa solo para llegar a fin de mes y darte el gustazo de salir a cenar de vez en cuando.

Creo que hay tres sencillas razones.

Tienes buena autoestima y confías en ti, tus trabajos y servicios son buenos y quieres ganar más (de lo contrario, habrías puesto tu saber a disposición de otra persona siendo un empleado).

Pero hoy sigues trabajando muchas horas y los resultados no son los que esperabas, viendo algunos colegas que les va muy bien y a ti, a pesar de que sigues formándote, no te acaban de salir los números.

Te guste o no, tarde o temprano nos daremos cuenta de que somos vendedores y tenemos que probar y cambiar para rentabilizar más nuestro trabajo, olvidando que vender es una actividad vulgar y que no se alinea con nuestro oficio, empezando por explicarlo bien a nuestros colaboradores.

Y no porque yo encontrara las instrucciones precisas para funcionar, debajo de un árbol.

Lo probé, lo estudié y lo sigo haciendo hoy, con buenos resultados y con estudio constante.

De hecho, cuando tienes una pyme, todos los días nos enfrentamos a tantas elecciones que hacer y algunas en muy poco tiempo, arriesgándonos a tomar decisiones precipitadas.

A veces probando aciertas lo que buscas, va mejor de lo que esperas y es más fácil de lo que imaginabas.

J.B.

 

Xavier Bustamante – sobre lo escrito por Juan Balaguer

Me siento aludido en este post 🙂

Soy de los que ven con desconfianza el término ‘Vender’.

La venta, como muchas otras actividades en nuestra sociedad, se ha visto afectada, muy influenciada en su descripción, por los abusos y malas paxis de numerosos vende-humos, timadores, creadores de falsas espectativas y falseadores varios de la realidad de un producto.

En las ofertas de los productos y servicios de hoy en día, a primera vista vista ya, se vislumbran montones de inexactitudes, confusas palabras, rimbombantes calificativos que enmascaran la realidad y, en muchos casos, confunde al cliente llevándolo lejos de lo que realmente quiere y necesita.

No olvidemos que nosotros también somos clientes de todo tipo de productos y servicios, coleccionistas en muchas ocasiones de desilusionantes experiencias al respecto.

Así pues, cuando me dicen que tengo que ‘vender’ mi producto, tengo la impresión que se me pide algo más que ofrecerlo, resaltando las virtudes de éste.

Me suena como que tengo que hacer que si o si, sin ninguna otra consideración, el cliente acabe llevándose mi producto.

Se que tú, Juan, no te refieres a la venta como un acto de pillaje o engaño, pero han hecho que suene así.

Tal vez tengamos que reinventar otro término.

Personalmente me siento más cómodo comercializando que no vendiendo.

Es una lástima porque aunque adoptáramos cualquier otra palabra para ello, los filibusteros del parecer, los creadores de espectativas, encargados todos ellos de ‘cubrir’ nuestras necesidades previamente creadas por ellos mismos, acabarían desvirtuándola.

En todo caso, está claro que si no comercializamos nuestros productos, nuestros servicios, estamos condenados a desaparecer, y esto es, Juan, de lo que se trata tu post, y en eso estamos totalmente de acuerdo…

 

 

 

Facebook
WhatsApp
Twitter
LinkedIn
Sobre el Autor
@

Lo último en Adictos

Este sitio web utiliza cookies propias y de terceros para ofrecerle una mejor experiencia de usuario y obtener datos estadísticos de navegación de los usuarios.  Para más información vea la Política de cookies