adcts – A grandes rasgos, ¿Cuál crees que son los problemas pendientes de abordar de nuestro sector?
LC – Bueno aunque pienso que nuestro sector es cada vez más sólido, es obvio que en algunos aspectos flaqueamos bastante.
Tengo que tener mucho cuidado cómo voy a decir las cosas, porque no quiero que nadie se moleste.
Todo lo que diré es en términos generales y probablemente mucho peluqueros piensen de diferente forma a la que yo lo hago.
Además no todas las peluquerías están en la misma situación y lo que está muy claro es que, dependiendo de ubicación geográfica, las necesidades pueden cambiar.
Dicho esto, los problemas pendientes de abordar en nuestro sector son muchos y muy diversos.
Los principales ahora mismo son:
- Poder mantenerse a flote tras un año de pandemia.
- La bajada del IVA al 10 %.
- Tener unos precios dignos para poder tener beneficios y además poder pagar unos sueldos acordes al nivel de vida que establece nuestra sociedad.
- La formación en las academias y el gran paso que tiene que dar un estudiante de peluquería para iniciarse en el terreno laboral.
adcts – De todos estos ¿Cuál crees que es la prioridad nº1?
LC – Todas ellas son importantes y todas ellas están correlacionadas.
A precios más altos, mayores beneficios y mejores sueldos.
A impuestos más justos menos fraude fiscal y las cuentas más claras.
A mejor formación mayor impacto positivo a la hora de empezar a trabajar en un salón.
adcts – ¿Cómo crees que La Peluquería debería abordarlos?
LC – Si queremos unos impuestos más justos no tendremos más remedio que tomar las calles y hacer mucho ruido para ser escuchados.
No sólo hay que ser escuchados.
El mensaje que tenemos que dar a nuestros políticos ha de ser claro, contundente y fácil de entender.
Ellos no son autónomos, por eso no entienden nuestra situación.
No entienden que pidamos una reducción del IVA al 10%, porque a ellos no les cabe en la cabeza que el IVA lo estemos asumiendo a costa de nuestros beneficios.
Ellos creen que sea cual sea el IVA, nuestro beneficio siempre es del mismo y eso se lo tenemos que explicar además de con pancartas y presencia en la calle, en las redes y en los medios, tenemos que hacerlo también con cifras y ejemplos reales.
Yo tengo un ejemplo muy claro que siempre que lo utilizo la gente lo entiende perfectamente y es el siguiente.
Cuando un fontanero, un electricista, el técnico del aire acondicionado o cualquier otra persona que desarrolle un oficio (y ahí deberíamos de estar los peluqueros , pero lamentablemente no es asi), viene a tu casa a realizar un trabajo te dan un presupuesto SIN IVA.
Tras realizar el servicio te cobran el precio acordado, vamos a suponer que son 100€.
Da igual cual sea el IVA ellos se van a llevar 100 euros porque si el IVA es de un 10% te van a cobrar 110€ y si el IVA es des 21% entonces pagarás 121€, ellos pagaran su IVA correspondiente que tu les has pagado en la factura y se quedarán SIEMPRE con los 100€.
Pero en peluquería no lo hemos hecho nunca así.
Los 100€ que cobramos son con IVA incluido con lo cual cuanto mayor sea el IVA menos es nuestro beneficio.
En un ticket de 100€ con un IVA de 10% pagaríamos 9,09€ de IVA pero sólo nos quedaríamos con 90,90 para nosotros (ya estamos ganando menos que el fontanero).
Con un IVA de 21% de esos 100 euros 82,6€ sería para nosotros y 17,4€ sería el IVA.
Ahí radica el error.
Nuestro precios deberían ser siempre igual como los del fontanero y quedarnos siempre con los 100€.
Lo que ocurre es que hemos educado al cliente de esta otra forma y cambiar eso ahora sería complicado.
Para poder cambiarlo, todos los peluqueros deberíamos de actuar conjuntamente para que nuestro sistema no tenga fisuras y de esa forma el cliente tendría que aceptar este sistema si o si.
El problema que tenemos es la desunión.
Si unos lo hacen y otros no, muchos clientes se van a ir con quienes no les cobren el IVA a mayores.
Recuerdo cuando nos subieron el IVA al 21% ver grandes carteles en las peluquerías diciendo “NO VAMOS A SUBIR LOS PRECIOS , NOSOTROS ASUMIREMOS EL 13% DE SUBIDA DE IVA” .
El problema es que ahora que la producción ha bajado, los salarios mínimos han subido y con ello la seguridad social, nos encontramos en la tesitura de que no podemos soportar esa pérdida de beneficios.
Es ahora cuando estamos pagando las consecuencias de los errores que cometimos entonces mientras el fontanero, electricista etc siguen teniendo los mismos beneficios, nosotros no.
Pero repito, para ello el sector debería de hablar un mismo idioma, independientemente de si tenemos una peluquería con precios más bajos o más altos.
Porque a todos nos pasa lo mismo.
Por otra parte existe el fraude fiscal, que solo desaparecerá el día que las cosas se hagan como se tienen que hacer.
El beneficio de algunos dependa del fraude fiscal, significará que el resto del sector estará en desventaja y el problema seguirá estando ahí.
Cuando el dinero en efectivo deje de circular, y eso es un hecho que cada día es más notorio, no nos quedará más remedio que subir los precios si no queremos echar el cierre o que hacienda no se nos eche encima.
adcts – La unión mayoritaria del sector ¿Es una utopía? ¿Tenemos la suficiente madurez para conseguirlo?
LC – Bueno creo que hoy en día los peluqueros hemos demostrado que estamos algo más unidos que en el pasado.
Las redes sociales y el muestreo de nuestro trabajo en ellas ha hecho que todos aprendamos de todos.
El peluquero que se metía detrás de una cortina a preparar su fórmula secreta sin que le vieran sus colaboradores ha desaparecido.
Por fin hemos entendido que la competencia es inevitable y hemos visto que además nos favorece el hecho de que todos compartamos nuestros conocimientos, obteniendo como resultado una mayor calidad en nuestros servicios.
Eso también ha hecho que el cliente sepa más y sea más exigente.
Siempre he tratado de llevarme bien con mis vecinos peluqueros, siempre he tratado de acercarme al peluquero que lo está petando en ese momento o al peluquero anónimo que nadie conoce y que tiene algo que ofrecer.
Siempre lo he hecho con mucha humildad y respeto y así lo han entendido y no hemos tenido ningún problema en compartir jornadas de trabajo incluso, con resultados altamente enriquecedores.
Y no solo eso.
Yo pienso que todo el mundo tiene un talento, algo que se le da mejor.
A lo largo de toda mi carrera me he acercado a todo tipo de peluqueros o peluqueras, de todos los ámbitos y rincones, de ciudades, de pueblos, de salones grandes y también de pequeños.
De repente en el lugar más recóndito te puedes encontrar una persona que sea maravillosa haciendo un determinado tipo de trabajo, y que está ahí simplemente porque ha decidido tener un pequeño salón o vivir en el pico de una montaña porque esa ha sido su elección o porque no ha sentido la necesidad de irse a otro lugar ya que allí es feliz.
He sacado la conclusión de que nunca subestimemos a nadie por el lugar en el que está ya que siempre tendrá algo que nos sorprenda.
Yo he recibido cursos de ondas de la mano de peluqueras octogenarias, que tenían los dedos doblados de la artrosis pero que me enseñaron con mucha paciencia y disposición técnicas que no hubiera podido aprender en las mejores escuelas.
Pero volviendo al tema, SI creo que cuanto mayor sea la unión entre los profesionales del sector, más firmes y grandes serán los pasos y los logros que alcanzaremos.
No creo que sea una utopía, de hecho pienso que ya es una realidad.
adcts – Es la unión la solución a los problemas fundamentales del sector?
LC– Bueno ya lo he contestado antes.
La unión es parte de la solución, una parte muy importante.
Dignificar el oficio y hacer las cosas bien de base es otra parte muy importante también.
Por eso necesitamos referentes, personas con una capacidad de liderazgo que nos acompañen en el camino.
Lo que menos necesitamos es gente con egos superlativos que no vivan la realidad.
Necesitamos avanzar con personas que tienen los mismos problemas que nosotros, que les haya costado llegar a final de mes, que hayan tenido que hacer cábalas para poder pagar los impuestos o el alquiler.
Personas con experiencia que no solo hayan llegado aquí y hayan tenido éxito.
Cuando las cosas son demasiado fáciles no podemos conocer el sabor amargo de la derrota y de eso es de lo que más se aprende.
adcts – ¿Existen en La Peluquería, líderes capaces de encabezar un proyecto de unificación?
LC – Jajjajjja parece que te voy contestando las preguntas en la pregunta anterior.
Por supuesto.
Existen personas comprometidas , con mucha iniciativa, personas que cuando están en sus casas le dan vueltas a la cabeza para ver de qué forma pueden mejorar el oficio, o de que forma pueden aportar un granito de arena para que esto tire para arriba.
Gente que con su implicación y sin saberlo han logrado escribir una página en la historia de la peluquería y te puedo asegurar que para eso no necesitas ser el que mejor corta el pelo, ni el que mejor aplica un color.
Aquí estamos poniendo sobre la mesa otros valores.
Tenemos que perder nuestro miedos , tenemos que sentirnos orgullosos de ser peluqueros.
Hoy mismo 15 febrero, un compañero ,José Sile decidió plantarse enfrente del congreso de los diputados con una sencilla pancarta pidiendo la bajada del IVA.
Esas iniciativas son las que necesitamos, y allí nos presentamos unos pocos para ser escuchados.
Estoy convencido de que cada lunes seremos más.
Desde aquí invito a todo el que se quiera unir a la causa, estaremos todos los lunes de 10,30 a 12,30 frente al congreso.
Nuestro oficio, en mi opinión es el más bonito que existe, es irrepetible, cada día con las mismas herramientas podemos crear obras diferentes y lo mejor de todo es que nuestro trabajo es la mayor causa de felicidad de nuestros clientes y lo más importante, solo nosotros sabemos hacerlo de la manera que cada uno sabe hacerlo.
Por eso cada peluquero es único.
No es normal que nuestros clientes nos valoren más de lo que lo hacemos nosotros mismos.
Yo ,como casi todos los peluqueros del mundo he tenido mis crisis con mi profesión.
Cuando me ha pasado eso he salido corriendo y he pensado :¿qué puedo hacer para volver a motivarme?.
En ocasiones lo he dejado todo y me he aventurado a cosas diferentes dentro del sector.
Ahora mi proyecto es CORTA CABEZA pero tengo muy claro que no sé cual será mi proyecto mañana.
Lo que si sé es que siempre seré lo que soy , simple y llanamente PELUQUERO.
Bueno estaría aquí sentado escribiendo un libro pero no os quiero aburrir.
Realmente lo que me gustaría sería sentarme en una sala con compañeros de profesión , con personas de otros sectores también como editores, periodistas , fotógrafos y charlar largo rato al respecto de todo eso.
Luciano Cañete de CORTA CABEZA
